Landing - Poemas de Gema Santamaría
Landing
Poema publicado el 08 de Abril de 2003
se hace necesario volver. volver de vez en cuando sobre una misma.
escuchar la saliva untándose en los labios, el tronar de su paso
en los dientes, su desliz delicado bajo la lengua hasta que
atraviesa la garganta y rompe el desierto.
es necesario callar. salir de este cuerpo de títere, romper sus
amarras y lanzarse al naufragio. hundirse en la profunda claridad
que se teje al final de nuestra cueva interna y observar. ser testigo del propio abismo.
Nicaragüense
se hace necesario volver. para revivir la tristeza y escuchar su
paso aletargado detrás de las puertas de los cuartos apagados.
abrir el oído hasta que la angustia del trueno se deshaga y deje
pasar los sonidos enanos de la calma.
es necesario mirar. ver cómo transcurren las sombras bajo el
capricho de la luz para entender que no hay voluntad que no
dependa de la luz de otra. ver la sangre herida, envejeciendo en
cicatrices anecdóticas, doblando al propio cuerpo, hasta quedar vencida por el tiempo.
pero sobre todas las cosas, es necesario volver a ti, para que
no se mueran las ansias, para no perder la poesía escurridiza en
la engañosa rutina del día, en esta vida ordinaria, en esta calculada trampa.
Poema publicado el 08 de Abril de 2003
se hace necesario volver. volver de vez en cuando sobre una misma.
escuchar la saliva untándose en los labios, el tronar de su paso
en los dientes, su desliz delicado bajo la lengua hasta que
atraviesa la garganta y rompe el desierto.
es necesario callar. salir de este cuerpo de títere, romper sus
amarras y lanzarse al naufragio. hundirse en la profunda claridad
que se teje al final de nuestra cueva interna y observar. ser testigo del propio abismo.
Nicaragüense
se hace necesario volver. para revivir la tristeza y escuchar su
paso aletargado detrás de las puertas de los cuartos apagados.
abrir el oído hasta que la angustia del trueno se deshaga y deje
pasar los sonidos enanos de la calma.
es necesario mirar. ver cómo transcurren las sombras bajo el
capricho de la luz para entender que no hay voluntad que no
dependa de la luz de otra. ver la sangre herida, envejeciendo en
cicatrices anecdóticas, doblando al propio cuerpo, hasta quedar vencida por el tiempo.
pero sobre todas las cosas, es necesario volver a ti, para que
no se mueran las ansias, para no perder la poesía escurridiza en
la engañosa rutina del día, en esta vida ordinaria, en esta calculada trampa.
¿Te gusta este poema? Compártelo:
«« más poemas de Gema Santamaría