Años dorados - Poemas de Patricia Zuleta
Años dorados
Poema publicado el 26 de Enero de 2024
*Años Dorados*
De niña, mis primeros años
me sentía como un estorbo
por todo me regañaban,
pero, solo había nacido niña.
Todo era no, no se puede,
todo era malo o inadecuado
y si le sonreía a alguien
era la india putona.
¡Crecí! pero solo en estatura,
en el fondo era siempre
la niña temerosa de reír.
Y llegó la hermosa juventud
pero se sentía fea,
como mariposa de alas rotas/
¡Una mujer, un sope más!
¡Niñas grandes hambrientas! Hambrientas de amor
que nunca conocieron
¡Porque eran niñas!
Es como una cruel trampa,
un morta ciclo,
que condena a la mujer
a no tener años dorados.
Y si a así tiene un logro
una carrera, un trabajo,
incluso algo de fama,
se le tilda de egoísta.
¿Es qué no te bastan los hijos?/
¿No te basto yo para ser feliz?/
¡Tienes que ser la señora!
La que nunca sale de casa.
Entonces, hablar de felicidad
y de años dorados...
se reduce a hablar de los hijos,/
delos nietos, la bella casa,
Eso es lo bueno.
¡Benditas sean las egoístas!
que a pesar de los hijos,
los compromisos y la casa
desiden abrir sus alas.
Patricia Zuleta, cantora DR.
El Salvador
Poema publicado el 26 de Enero de 2024
*Años Dorados*
De niña, mis primeros años
me sentía como un estorbo
por todo me regañaban,
pero, solo había nacido niña.
Todo era no, no se puede,
todo era malo o inadecuado
y si le sonreía a alguien
era la india putona.
¡Crecí! pero solo en estatura,
en el fondo era siempre
la niña temerosa de reír.
Y llegó la hermosa juventud
pero se sentía fea,
como mariposa de alas rotas/
¡Una mujer, un sope más!
¡Niñas grandes hambrientas! Hambrientas de amor
que nunca conocieron
¡Porque eran niñas!
Es como una cruel trampa,
un morta ciclo,
que condena a la mujer
a no tener años dorados.
Y si a así tiene un logro
una carrera, un trabajo,
incluso algo de fama,
se le tilda de egoísta.
¿Es qué no te bastan los hijos?/
¿No te basto yo para ser feliz?/
¡Tienes que ser la señora!
La que nunca sale de casa.
Entonces, hablar de felicidad
y de años dorados...
se reduce a hablar de los hijos,/
delos nietos, la bella casa,
Eso es lo bueno.
¡Benditas sean las egoístas!
que a pesar de los hijos,
los compromisos y la casa
desiden abrir sus alas.
Patricia Zuleta, cantora DR.
El Salvador
¿Te gusta este poema? Compártelo:
«« más poemas de Patricia Zuleta