Mecen tus ojos - Poemas de José Antonio Llamas Fernández
Mecen tus ojos
Poema publicado el 02 de Junio de 2005
Mecen tus ojos su dolor en la hora sexta
y en algún lugar del mundo,
en las álgidas calderas atizadas por la ruina,
lentamente cuecen los venenos y las iras
Como una madre que regresa de los cañaverales
sorteando las serpientes
tras los gritos de su hijo
y ahora mece la cuna ya vacía;
así, caída la mirada,
buscas tu dolor perdido
Mecen tus manos su temblor
mientras en algún lugar dormitan
tus antiguos sueños perseguidos
Como una vela por el mar
estrangulada en el zarpazo de los vientos
como maromas azotadas por los látigos podridos
de un vendaval que sopla dando aullidos
así, caída el alma en un turbión de espejos crudos,
buscas tu corazón, en la penumbra
Vientos contrarios zarandean la hermosura
de vivir en libertad, como los días
La tormenta, que no acaba de llegar,
pero que anuncian las campanas del acantilado
ha comenzado a devastar toda tu vida
Como voraces marejadas de salitre
mecen tus ojos su dolor en el exilio
Poema publicado el 02 de Junio de 2005
Mecen tus ojos su dolor en la hora sexta
y en algún lugar del mundo,
en las álgidas calderas atizadas por la ruina,
lentamente cuecen los venenos y las iras
Como una madre que regresa de los cañaverales
sorteando las serpientes
tras los gritos de su hijo
y ahora mece la cuna ya vacía;
así, caída la mirada,
buscas tu dolor perdido
Mecen tus manos su temblor
mientras en algún lugar dormitan
tus antiguos sueños perseguidos
Como una vela por el mar
estrangulada en el zarpazo de los vientos
como maromas azotadas por los látigos podridos
de un vendaval que sopla dando aullidos
así, caída el alma en un turbión de espejos crudos,
buscas tu corazón, en la penumbra
Vientos contrarios zarandean la hermosura
de vivir en libertad, como los días
La tormenta, que no acaba de llegar,
pero que anuncian las campanas del acantilado
ha comenzado a devastar toda tu vida
Como voraces marejadas de salitre
mecen tus ojos su dolor en el exilio
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