Asilo de las artes - Poemas de FLORIANO MARTINS
Poema publicado el 15 de Noviembre de 2002
Recoger el arte abandonado, y darle cuidados mínimos, aunque fuera del tiempo. ¿La realidad enloquece el arte? ¿Delante de un crimen pasional -esa perla del falso amor- como reacciona un poema, una película, una escultura? ¿Con cuál arte me siento listo para enfrentar el pasado? Aturdido, hambriento, humillado, el artista deambula por recintos de su espíritu donde no tiene cabida la ley de las proporciones. Se disocia de sí sin comprender lo que está en la otra punta del ser. Adicto de la petición, vegeta sin la caridad institucional. En busca de su cuota de esplendor. El mundo está así dividido: en cuotas de esplendor. ¿Cuántos conocemos: músicos, poetas, pintores? ¿Qué oblicua relación con la realidad evitan ellos? ¿Habrá un asilo para los que abandonan el mundo? ¿Se les dará refugio? Entonces, ¿de que está hecho el arte sino de un duro conocimiento de las escarpas más lacerantes de la existencia? ¿Se dará asistencia a los que se dejan enloquecer por la realidad? Farsantes, ególatras, disolventes, serán todos recogidos bajo amparo del estado. ¿Una maniobra insospechada? No, un ojo grande. El arte no se dirige a parte alguna, a solas. |