Pero ante todo es casada - Poemas de Dante Franco Córdova Martínez
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Pero ante todo es casada
Poema publicado el 18 de Febrero de 2003
¿Qué por qué la miro de ese modo?,
¿qué por qué le hablo de esa forma?,
porque es usted la señora
que a mi existencia le alivia,
y con sólo contemplarla me priva
la indiferencia que hacía usted
quiero tener,
pero ante todo es casada
y teniendo su marido,
no la puedo poseer.
Yo no puedo hacerla mía,
aunque siempre usted lo la ha sido,
porque dentro muy escondido
en su corazón me desea,
y sin querer me demuestra,
porque al mirarla de un modo,
o hablarle de una manera,
sin evitar se le escapa
un suspiro que la quema
y la abrasa todo el tiempo;
pero ante todo es casada
y teniendo su marido,
no puede evitar las ansias
de hacer el amor conmigo,
de sentirse ave cautiva
en la prisión de mis brazos,
recibiendo entre sus labios
un rosario de mil besos,
dándome en esos momentos,
su cuerpo entero y su alma,
calcinándose entre la llama
que le ofrece mi pasión.
Pero ante todo es casada,
y teniendo su marido,
ha de seguir su camino,
y yo el mío... sin su amor.
Poema publicado el 18 de Febrero de 2003
¿Qué por qué la miro de ese modo?,
¿qué por qué le hablo de esa forma?,
porque es usted la señora
que a mi existencia le alivia,
y con sólo contemplarla me priva
la indiferencia que hacía usted
quiero tener,
pero ante todo es casada
y teniendo su marido,
no la puedo poseer.
Yo no puedo hacerla mía,
aunque siempre usted lo la ha sido,
porque dentro muy escondido
en su corazón me desea,
y sin querer me demuestra,
porque al mirarla de un modo,
o hablarle de una manera,
sin evitar se le escapa
un suspiro que la quema
y la abrasa todo el tiempo;
pero ante todo es casada
y teniendo su marido,
no puede evitar las ansias
de hacer el amor conmigo,
de sentirse ave cautiva
en la prisión de mis brazos,
recibiendo entre sus labios
un rosario de mil besos,
dándome en esos momentos,
su cuerpo entero y su alma,
calcinándose entre la llama
que le ofrece mi pasión.
Pero ante todo es casada,
y teniendo su marido,
ha de seguir su camino,
y yo el mío... sin su amor.
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