Lección de filosofía - Poemas de Israel Jimenez
Lección de filosofía
Poema publicado el 05 de Octubre de 2011
LECCION DE FILOSOFÍA
La felicidad no existe.
Como todo lo que rodea al mundo
Es un invento humano.
Busca explicarse su propia existencia,
Darle una razón de ser.
Crea dioses y leyes físicas que los contradicen.
Mira al cielo infinito y busca respuestas.
No hay respuestas.
Da nombre a las cosas poniéndose en el centro,
A sus deseos los sublima tratando de ser él mismo
Inmortal.
Se sobrecoge ante el lamento o ante el gozo
Porque no sabe qué esperar.
El hombre está limitado por su propio ego:
Crea, pinta, escribe, inventa
Quiere ser perfecto, iluso infecto.
Pero ese intento desesperado de alcanzar la perfección
Se ve eclipsado por el doloroso despertar
De su conciencia,
De mirar su deficiencia,
Su falta de ideas,
De sus límites.
Cuando el hombre se de cuenta de que
La tal pretendida perfección
(Dios, belleza, amor, libertad) no existe,
La vida le será más soportable.
No hay nadie con ese nivel de compromiso
Ergo, nadie es libre.
Todos dependemos de todos:
Yo camino y tú te mueves,
Yo suplico y tú redimes.
¿Falta algo en mi razonamiento?
Por supuesto que si Ícaro,
¿Recuerdas a quién se le derritieron las alas?
Poema publicado el 05 de Octubre de 2011
LECCION DE FILOSOFÍA
La felicidad no existe.
Como todo lo que rodea al mundo
Es un invento humano.
Busca explicarse su propia existencia,
Darle una razón de ser.
Crea dioses y leyes físicas que los contradicen.
Mira al cielo infinito y busca respuestas.
No hay respuestas.
Da nombre a las cosas poniéndose en el centro,
A sus deseos los sublima tratando de ser él mismo
Inmortal.
Se sobrecoge ante el lamento o ante el gozo
Porque no sabe qué esperar.
El hombre está limitado por su propio ego:
Crea, pinta, escribe, inventa
Quiere ser perfecto, iluso infecto.
Pero ese intento desesperado de alcanzar la perfección
Se ve eclipsado por el doloroso despertar
De su conciencia,
De mirar su deficiencia,
Su falta de ideas,
De sus límites.
Cuando el hombre se de cuenta de que
La tal pretendida perfección
(Dios, belleza, amor, libertad) no existe,
La vida le será más soportable.
No hay nadie con ese nivel de compromiso
Ergo, nadie es libre.
Todos dependemos de todos:
Yo camino y tú te mueves,
Yo suplico y tú redimes.
¿Falta algo en mi razonamiento?
Por supuesto que si Ícaro,
¿Recuerdas a quién se le derritieron las alas?
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