Instrumento - Poemas de VILMA VARGAS
Instrumento
Poema publicado el 25 de Septiembre de 2002
El tiempo
detrás de cada árbol
nos despoja.
Vamos de un sitio a otro
como si nada existiera,
como el viento que huye.
Las campanadas no se detienen:
racimos negros que el oído recibe.
Fui el huésped que en la maleza
grabó el brío como una estrella.
Pero vienen los de mi casa
y me rodean llenos de compasión.
Yo pienso en la tierra y sus terrones violentos.
Se apaga el golpe de los trenes.
Queda sólo la mandolina
que abrió la sangre y aguzó la voz.
Poema publicado el 25 de Septiembre de 2002
El tiempo
detrás de cada árbol
nos despoja.
Vamos de un sitio a otro
como si nada existiera,
como el viento que huye.
Las campanadas no se detienen:
racimos negros que el oído recibe.
Fui el huésped que en la maleza
grabó el brío como una estrella.
Pero vienen los de mi casa
y me rodean llenos de compasión.
Yo pienso en la tierra y sus terrones violentos.
Se apaga el golpe de los trenes.
Queda sólo la mandolina
que abrió la sangre y aguzó la voz.
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