Poemas de SAN JUAN DE LA CRUZ
SAN JUAN DE LA CRUZ
Juan de Yepes Álvarez (*Fontiveros, Ávila, España, 24 de junio de 1542 - †Úbeda,
14 de diciembre de 1591), conocido como San Juan de la Cruz, fue un poeta y
religioso español. Desde 1952 es el Patrono de los poetas en lengua española.
Era hijo de Gonzalo de Yepes y de Catalina Álvarez,
tejedores de buratos. El padre y el hermano pequeño, Luis, mueren cuando Juan
tiene sólo tres años, por lo que la madre y los dos hijos restantes (Francisco y
el propio Juan) se ven obligados por la acuciante pobreza (las penalidades
pasadas hicieron de Juan un hombre de escasa corpulencia, bastante bajo de
estatura (Santa Teresa lo llamaba "mi medio fraile")) a trasladarse primero a
Arévalo (donde viven durante cuatro años) y en 1551 a Medina del Campo. Allí,
aliviados algo por el incremento de fortuna que les ha reportado el matrimonio
del hermano mayor, se instalan definitivamente. Juan, gracias a su condición de
pobre de solemnidad, puede asistir al Colegio de los Niños de la Doctrina,
privilegio que le obliga a realizar ciertas contraprestaciones, como asistir en
el convento, la ayuda a Misa y a los Oficios, el acompañamiento de entierros y
la práctica de pedir limosna. La mínima formación recibida en el colegio le
capacitó para continuar su formación en el recién creado (1551) colegio de los
jesuitas, que le dieron una sólida base en Humanidades. Como alumno externo y a
tiempo parcial, debía compaginar sus estudios con un trabajo asistencial en el
Hospital de Nuestra Señora de la Concepción de Medina, especializado en la
curación de enfermedades venéreas contagiosas.
Así, pues, entre 1559 y 1563, estudia con los jesuitas; durante los primeros
tres años, recibe la formación según la novedosa ratio studiorum, en la que el
latín era la base de todos los estudios; en el cuarto año, aparte de recibir
formación en retórica, aprende a escribir en latín, a construir versos latinos y
a traducir a Cicerón, César, Virgilio, Ovidio, Marcial y Horacio.
Simultáneamente, vive las nuevas corrientes del humanismo cristiano, con estilo
y comportamientos renovados en la pedagogía.
A los veintiún años, en 1563, ingresa en los Padres Carmelitas de Medina (orden
de los Carmelitas), adoptando el nombre de fray Juan de Santo Matía. Tras
realizar el noviciado entre 1563 y 1564 en el convento de Santa Ana, se traslada
a Salamanca donde estudiará en el Colegio de San Andrés de los Cármenes entre
1564 y 1567 los tres cursos preceptivos para bachillerarse en Artes. Durante el
tercer curso, fue nombrado, por sus destrezas dialécticas, prefecto de
estudiantes en el colegio de San Andrés.
En 1567 regresa a Medina del Campo por unos pocos días para ser ordenado
presbítero y celebrar su primera misa en presencia de su hermano, del resto de
su familia y de sus amigos del convento. Allí conocerá a Teresa de Cepeda y
Ahumada, futura Santa Teresa de Jesús, que había llegado a la ciudad para fundar
una nueva sede de su Reforma Carmelita, los llamados carmelitas descalzos.
Teresa convence a Juan y lo une a su causa de reforma de los Carmelitas. Esta
orden reformada tropezó con una gran hostilidad por parte de los carmelitas
calzados.
Juan regresa a Salamanca e inicia estudios de Teología durante el curso
1567-1568, pero solo realiza un curso, cuando los preceptivos hubieran sido
cuatro, por lo que no obtuvo ni siquiera el grado de bachiller.
En agosto de 1568 abandona Salamanca para acompañar a Teresa en su fundación
femenina de Valladolid.
El 28 de noviembre de 1568 funda en Duruelo el primer convento de Descalzos de
la rama masculina del Carmelo Descalzo siguiendo la Regla Primitiva, esto es, un
establecimiento que propugna el retorno a la práctica original de la Orden; en
la ceremonia, cambia su nombre por el de fray Juan de la Cruz. En 1570 la
fundación se trasladó a Mancera, donde Juan desempeño el cargo de Subprior y
Maestro de novicios; tras una estancia en Pastrana para poner en marcha su
noviciado, se establece en 1571 en Alcalá de Henares, como Rector del colegio
reción fundado.
Juan se convierte en uno de los principales formadores para los nuevos adeptos a
esta reforma carmelitana. En 1572, Juan de la Cruz viaja, a invitación de Teresa
de Jesús, al Convento de la Encarnación, en donde asumirá las tareas de Vicario
y Confesor de las monjas. Permanecerá aquí hasta finales de 1577, por lo que
acompañará a la madre Teresa a la fundación de diversos conventos de Descalzas,
como el de Segovia.
Durante este periodo, en el seno de la Orden del Carmen se habían agravado los
conflictos jurisdiccionales entre los carmelitas calzados y descalzos, debidos a
distintos enfoques espirituales de la reforma; por lo demás, el pleito se
enmarcaba también en la confrontación entre el poder real y el pontificio por
dominar el sector de las órdenes religiosas. Así, en 1575, el Capítulo General
de los Carmelitas decidió enviar un visitador de la Orden para suprimir los
convento fundados sin licencia del General y de recluir a la madre Teresa en un
convento. Finalmente, en 1580 el Carmelo Descalzo se erige en Provincia exenta y
en 1588 es reconocida como Orden.
En este contexto es en el que se produce el encarcelamiento de Juan de la Cruz,
quien ya en 1575 había sido detenido y encarcelado en Medina del Campo durante
unos días por los frailes calzados. La noche del 3 de diciembre de 1577 Juan de
la Cruz es nuevamente apresado y trasladado al convento de frailes carmelitas de
Toledo, donde es obligado a comparecer ante un tribunal de frailes calzados para
retractarse de la Reforma teresiana. Ante su negativa, es recluido en una
prisión conventual durante ocho meses.
Es durante este periodo de reclusión cuando escribe las treinta y una primeras
estrofas del Cántico espiritual (en la versión conocida como protocántico),
varios romances y el poema de la fonte.
Tras concienciarse de que su liberación iba a ser difícil, planea detenidamente
su fuga y entre el 16 y el 18 de mayo de 1578, con la ayuda de un carcelero, se
escapa en medio de la noche y se acoge en el convento de las Madres Carmelitas
Descalzas, también en Toledo. Para mayor seguridad, las monjas lo envían al
Hospital de Santa Cruz, en el que estuvo mes y medio.
En 1578 se dirige a Andalucía para recuperarse completamente. Pasa por Almodóvar
del Campo y luego llega como Vicario al convento de El Calvario en la serranía
jienense. Entabla amistad con Ana de Jesús, tras algunas visitas a la fundación
de Beas de Segura.
En junio de 1579 se establece en la fundación de Baeza donde permanece como
Rector del Colegio Mayor hasta 1582, en que marcha para Granada tras ser
nombrado Tercer Definidor y Prior de los Mártires de esa ciudad. Realiza
numerosos viajes por Andalucía y Portugal, por razones del cargo. En 1588 es
elegido Primer Definidor y Tercer Consiliario de la Consulta, la cual le
traslada a Segovia.
Tras un nuevo enfrentamiento doctrinal en 1590, es destituido en 1591 de todos
sus cargos, quedando como simple súbdito de la comunidad. Durante su viaje de
vuelta a Segovia, cae enfermo en el convento de La Peñuela y es trasladado a
Úbeda, donde muere la noche del 13 al 14 de diciembre.
Beatificación y canonización [editar]Inmediatamente tras su muerte, su cuerpo
es despojado y se inician los pleitos entre Úbeda y Segovia por la posesión de
sus restos. En 1593 sus restos, mutilados, son trasladados clandestinamente a
Segovia donde reposan actualmente.
El proceso de beatificación y canonización se inició en 1627 y finalizó en 1630.
Fue beatificado en 1657 por Clemente X y canonizado por Benedicto XIII en 1726.
Posteriormente, en 1926 Pío XI lo proclama Doctor de la Iglesia Universal y en
1952 es declarado patrono de los poetas españoles.
Poco después, su cuerpo fue robado y llevado a Segovia
glosa de el mismo
Sin arrimo y con arrimo, sin luz y a oscuras viviendo todo me voy cons......
coplas a lo divino
Tras de un amoroso lance y no de esperanza falto volé tan alto tan alt...... Esta es la página 1 de un total de 1