Visita a un solar - Poemas de NICOLÁS GUILLÉN
Visita a un solar
Poema publicado el 02 de Junio de 2009
(Turistas en un solar.
Canta Cantaliso un son
que no se puede bailar.)
-Mejor que en hotel de lujo,
quédense en este solar:
aquí encontrarán de sobra
lo que allá no han de encontrar.
Voy a presentar, señores,
a Juan Cocinero:
tiene una mesa, tiene una silla,
tiene una silla, tiene una mesa
y un reverbero.
El reverbero está sin candela,
muy disgustado con la cazuela.
¡Verán qué alegre, qué placentero,
qué alimentado, qué complacido
pasa la vida Juan Cocinero!
Interrumpe Juan Cocinero:
-¡Con lo que un turista traga
nada más que en aguardiente
cualquiera un cuarto se paga!
Sigue el son:
-...Y éste es Luis, el caramelero;
y éste es Carlos, el isleño;
y aquel negro
se llama Pedro Martínez,
y aquel otro,
Norberto Soto,
y aquella negra de más allá,
Petra Sardá.
Todos viven en un cuarto,
seguramente
porque resulta barato.
¡Qué gente,
que gente tan consecuente!
Todos a coro:
-¡Con lo que un turista traga
nada más que en aguardiente
cualquiera un cuarto se paga!
Sigue el son:
-Y la que tose, señores,
sobre esa cama.
se llama Juana:
tuberculosis en tercer grado.
por un resfriado
muy mal cuidado.
La muy idiota pasaba el día
sin un bocado.
¡Qué tontería!
¡Tanta comida que se ha botado
Todos a coro:
-¡Con lo que un yanqui ha gastado
no mas que en comprar botellas
se hubiera Juana curado!
Termina el son:
-¡Turistas, quédense aquí,
que voy a hacerlos gozar;
turistas, quédense aquí,
que voy a hacerlos gozar,
cantándoles sones, sones
que no se pueden bailar!
Poema publicado el 02 de Junio de 2009
(Turistas en un solar.
Canta Cantaliso un son
que no se puede bailar.)
-Mejor que en hotel de lujo,
quédense en este solar:
aquí encontrarán de sobra
lo que allá no han de encontrar.
Voy a presentar, señores,
a Juan Cocinero:
tiene una mesa, tiene una silla,
tiene una silla, tiene una mesa
y un reverbero.
El reverbero está sin candela,
muy disgustado con la cazuela.
¡Verán qué alegre, qué placentero,
qué alimentado, qué complacido
pasa la vida Juan Cocinero!
Interrumpe Juan Cocinero:
-¡Con lo que un turista traga
nada más que en aguardiente
cualquiera un cuarto se paga!
Sigue el son:
-...Y éste es Luis, el caramelero;
y éste es Carlos, el isleño;
y aquel negro
se llama Pedro Martínez,
y aquel otro,
Norberto Soto,
y aquella negra de más allá,
Petra Sardá.
Todos viven en un cuarto,
seguramente
porque resulta barato.
¡Qué gente,
que gente tan consecuente!
Todos a coro:
-¡Con lo que un turista traga
nada más que en aguardiente
cualquiera un cuarto se paga!
Sigue el son:
-Y la que tose, señores,
sobre esa cama.
se llama Juana:
tuberculosis en tercer grado.
por un resfriado
muy mal cuidado.
La muy idiota pasaba el día
sin un bocado.
¡Qué tontería!
¡Tanta comida que se ha botado
Todos a coro:
-¡Con lo que un yanqui ha gastado
no mas que en comprar botellas
se hubiera Juana curado!
Termina el son:
-¡Turistas, quédense aquí,
que voy a hacerlos gozar;
turistas, quédense aquí,
que voy a hacerlos gozar,
cantándoles sones, sones
que no se pueden bailar!
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