Al nacozari de ayer - Poemas de Antonio Munguia
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Al nacozari de ayer
Poema publicado el 17 de Noviembre de 2020
Mis recuerdos olvidados
Revelan paisajes bellos,
Que entre cobrizos destellos
Parecen medio borrados
Y en mi mente sepultados.
Al Nacozari querido
Aspiro al ser revivido
Reencarnado y reverente,
Donde radica mi gente
Y donde ha de ser mi nido.
Bien lo dijo un inspirado
Al cantarte entre las flores,
Que en veredas y en amores
Le dio su canto al poblado
Y fama a tu suelo amado.
Yo, con modestia y valor
Lanzo mi voz con amor,
Y recorro paso a paso
Tus lugares y regazo
Aunque me causen dolor.
Ese dolor es por verte
Envuelto en nuevas escenas
No todas a juzgar buenas,
Porque en tu faz veo inerte
Lo triste que hoy es tu suerte.
Falta algo que te dio brillo
Aunque de gusto sencillo:
Los bailes y los deseos
Cumplidos entre paseos
A la Cuesta del Castillo.
Al recuerdo de la historia
De fuente triste y local,
No es tanto al héroe inmortal
A quien se le da la gloria:
Pues con disipada euforia
Y política insensible,
La fiesta es de ruido horrible
Más que de luto sagrado.
Todo es negocio pagado
Y es tu espíritu invisible.
Ayer en casas seguras
Con naipes se entretenían,
Parejas que mantenían
Gustos sanos sin locuras
De apuestas o travesuras,
Sólo por pasar el rato.
Era alegre y bueno el trato
En fraternal convivencia.
Hoy es notable su ausencia,
Parece en sepia un retrato.
Mi clamor no es reprimido:
Miré que al tren recibía
El pueblo en algarabía,
En el andén reunido
Con júbilo no fingido.
La fiesta era muchedumbre
Corriendo "y echando lumbre"
Para llegar al momento
Del tren en su gran evento:
Con su arribo…la costumbre.
Desde "La Isla" hasta el fuero
De Colonia Americana,
El área completa hermana
Lo que fue ayer tu lindero
De bello pueblo minero.
La Biblioteca era al Este
Límite del campo agreste
Y al poniente era el panteón
El término y colofón
De tu ser casi celeste.
Ese fue mi pueblo amado
Donde mucho disfruté
Con amigos que dejé
Para volver al poblado
De mi familia y legado.
Desde aquí suspiro y sueño
En mis andanzas de ensueño,
Que entre tus cerros de cobre
Viví, no rico ni pobre,
Pero casi como dueño.
Poema publicado el 17 de Noviembre de 2020
Mis recuerdos olvidados
Revelan paisajes bellos,
Que entre cobrizos destellos
Parecen medio borrados
Y en mi mente sepultados.
Al Nacozari querido
Aspiro al ser revivido
Reencarnado y reverente,
Donde radica mi gente
Y donde ha de ser mi nido.
Bien lo dijo un inspirado
Al cantarte entre las flores,
Que en veredas y en amores
Le dio su canto al poblado
Y fama a tu suelo amado.
Yo, con modestia y valor
Lanzo mi voz con amor,
Y recorro paso a paso
Tus lugares y regazo
Aunque me causen dolor.
Ese dolor es por verte
Envuelto en nuevas escenas
No todas a juzgar buenas,
Porque en tu faz veo inerte
Lo triste que hoy es tu suerte.
Falta algo que te dio brillo
Aunque de gusto sencillo:
Los bailes y los deseos
Cumplidos entre paseos
A la Cuesta del Castillo.
Al recuerdo de la historia
De fuente triste y local,
No es tanto al héroe inmortal
A quien se le da la gloria:
Pues con disipada euforia
Y política insensible,
La fiesta es de ruido horrible
Más que de luto sagrado.
Todo es negocio pagado
Y es tu espíritu invisible.
Ayer en casas seguras
Con naipes se entretenían,
Parejas que mantenían
Gustos sanos sin locuras
De apuestas o travesuras,
Sólo por pasar el rato.
Era alegre y bueno el trato
En fraternal convivencia.
Hoy es notable su ausencia,
Parece en sepia un retrato.
Mi clamor no es reprimido:
Miré que al tren recibía
El pueblo en algarabía,
En el andén reunido
Con júbilo no fingido.
La fiesta era muchedumbre
Corriendo "y echando lumbre"
Para llegar al momento
Del tren en su gran evento:
Con su arribo…la costumbre.
Desde "La Isla" hasta el fuero
De Colonia Americana,
El área completa hermana
Lo que fue ayer tu lindero
De bello pueblo minero.
La Biblioteca era al Este
Límite del campo agreste
Y al poniente era el panteón
El término y colofón
De tu ser casi celeste.
Ese fue mi pueblo amado
Donde mucho disfruté
Con amigos que dejé
Para volver al poblado
De mi familia y legado.
Desde aquí suspiro y sueño
En mis andanzas de ensueño,
Que entre tus cerros de cobre
Viví, no rico ni pobre,
Pero casi como dueño.
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