Con tu verdad, con tu mentira a solas,
con tu increíble realidad vivida,
tu inventada razón, tu consumida
fe inagotable, en luz que tú enarbolas.
Con la tristeza en que tal vez te enrolas
hacia una rada nunca apetecida,
con la enorme esperanza destruida,
reconstruida, como el mar con sus olas;
con tu sueño de amor que nunca se hace
tan verdadero como el mar suspira,
con tu cargado corazón que nace,
muere y renace, asciende y muere, mira
la realidad, inmensa, porque ahí yace
tu verdad toda y toda tu mentira.
Selección: Luis María Anson
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